Pastel de moras invertido.
Los frutos rojos nos brindan excelentes beneficios para estar saludables, son antioxidantes, desintoxicantes y nos aportan gran contenidos de vitamina C. Esto, combinado con su agradable sabor , los colocan entre los preferidos por gran parte de la población mundial.
Las moras son buenos combatientes contra el colesterol malo y van muy bien en dulces, así que hemos traído para ti una mágica receta de pastel con moras: El pastel de moras invertido.
Ingredientes:
1 y 1/2 Tazas de harina cernida.
2 Cucharaditas de polvo de hornear.
1 y 1/3 Tazas de azúcar.
4 Huevos.
1 Cucharada de vainilla concentrada.
1 Vaso de leche.
1 Taza de mantequilla sin sal.
Una pizca de sal.
Para la cobertura:
1/2 Taza de mantequilla sin sal.
2/3 Taza de azúcar.
1 y 1/3 Tazas de moras.
Preparación:
Preparación:
Para la cubierta:
1.- En una sartén derrite a fuego medio la mantequilla y agrega las moras.
2.- Añade el azúcar. Cuando se hayan integrado los tres ingredientes y no existan grumos, baja el calor de cocción.
3.- Revuelve continuamente, preferiblemente con una cuchara de madera. Cuando tus moras estén blandas y la consistencia sea densa, tu cubierta estará lista.
Para el pastel:
1.- Toma tres de los huevos y separa las claras de las yemas. Bate las claras a punta de nieve y colócales una cucharada de azúcar para mantenerlas elevadas. Resérvalo.
2.- Integra la mantequilla con el resto del azúcar hasta que ya no puedas diferenciar una de la otra. Añade la vainilla, el cuarto huevo y las yemas que tenías reservadas, éstas debes agregarlas una a una mientras bates.
3.- Mezcla la harina con el polvo de hornear y agrégalos a la preparación, altérnalos con la leche.
4.- Añade las claras a punta de nieve en movimientos envolventes. Cuando todo esté homogeneizado, es momento de armar tu pastel de moras invertido.
La clave mágica:
1.- Engrasa un molde para tortas.
2.- Esparce y compacta equilibradamente tu mezcla de moras en el fondo del molde.
3.- Agrega la mezcla para tortas que preparaste.
4.- Hornea a 180º durante 60 minutos.
El momento de la magia:
Retira tu pastel del horno y dejalo enfriar de 10 a 15 minutos, voltéalo en una bandeja y voilá: Tienes un sorprendente pastel de vainilla cubierto de moras.
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